Redacción a cargo de Fernando Salinas // foto: www.planetf1.com

¿El causante de la investigación sobre los Wolff por parte de la FIA fue Christian Horner?

El director de equipo de la bebida energética siempre ha tenido roces con el director de Mercedes. De estos encontronazos surgió: 

Además, en el mundo de la Fórmula Uno nada es casualidad. 

¿Por qué razón al día siguiente de la explosión de la noticia, Horner quién casi nunca da entrevistas, salió en Sky Sports a desmentir su vinculación? 

Era evidente que todos los medios saldrían a teorizar al culpable después de que la FIA especificase que la investigación se dio a petición de un equipo, y entre ellos se encontrara Horner, aunque el, al igual que los Wolff no son más que el chivo expiatorio. 

Nadie esperaba que al unísono, los 9 equipos restantes se desvincularan de cualquier participación en esta investigación con textos copy paste. 

Inteligentemente los equipos han expuesto a la FIA como el único propiciante de esta investigación. Al día siguiente, el organismo central del mundo del automovilismo ha concluido que está tranquilo en lo que respecta a la gestión de la información confidencial de la FOM/Liberty Media, dando así carpetazo final. ¿Se acabó? No. 

Esto solo nos muestra la débil relación que la FIA y la FOM manejan desde hace algún tiempo. Cuando Ben Sulayem fue declarado presidente de la Federación del Automóvil en 2021, la comunicación ha probado ir en decadencia. 

En particular desde el anti-climatico final de la temporada 2021 en Abu Dhabi, cuando el control de carrera se vio envuelto en escándalo, y con ello, el primer campeonato de Max Verstappen. 

A pesar de todo lo ocurrido, Mohamed dice que de ser necesario volvería a traer a Michael Masi a la FIA, algo que claramente va en contra de lo que Toto Wolff querría, pues lo ha llamado “imbécil” en público. 

En tiempos recientes, parece haber ciertos aires de totalitarismo por parte del nacido en Dubai. El tema de la introducción de Andretti en la máxima categoría es otro tema del que ninguna escudería quiere saber. Nadie quiere repartir el pastel de miles de dólares para un onceavo equipo, uno que aparentemente viene con todo para triunfar. Aún así, Sulayem ha subrayado la importancia de tener más equipos en beneficio del espectáculo y es cierto. 

La Fórmula Uno tiene cabida para hasta doce escuderías. Cuatro pilotos más traerían mucha más emoción que un formato tan inestable como la Sprint, que cada vez parece un chiste de mal gusto que arruina la esencia de este tipo de carreras. 

Sin embargo, la FOM no lo ve con buenos ojos por el tema económico y es este tipo de situaciones, lo que ha propiciado la tensa relación de poderes existente entre ambos organismos.

Además, la FIA ha insinuado aumentar las multas a pilotos que pueden llegar hasta los seis ceros, por lo que también se ha ganado el rechazo de los mismos al considerarlas exageradas, acusando al ente de poca transparencia pues no se sabe con exactitud a dónde va a parar todo el dinero que entra a las arcas de la federación. 

Es curioso que la máxima categoría sea la única que sostiene esta pelea con la FIA, hasta el punto de que se cuestionan mantener esta unión. 

Un torneo independiente se comienza a rumorear en los medios, aunque no sería una buena opción, pues a pesar de que la FOM tiene a las escuderías y pilotos de su lado, la FIA sigue siendo la FIA. Este organismo no solo maneja la F1, también maneja el campeonato de resistencia, el campeonato de Rallys, la Fórmula E, GT3 etc.

Es como si la UEFA buscara separarse de la FIFA, es algo muy complicado de que suceda, pero no imposible, aunque en el proceso arruinaría totalmente el pasado de más de 80 años del automovilismo. 

Es aquí donde Sulayem tiene que mostrar sus habilidades políticas para llegar a un acuerdo con Steffano Domenicalli, actual presidente de los derechos comerciales de la F1 y ceder un poco esas impresiones autoritarias que parece tener. Si la FIA hubiera querido seguir a cargo de la Fórmula Uno simplemente no hubiera vendido esos derechos y menos por un periodo de 100 años, aunque recordemos el por qué lo hizo ($$$). 

Algo indudable es que el espectáculo está alcanzando niveles de audiencia que hace tiempo no se veían. Pelearse en este momento afectaría a lo que tanto buscan: audiencia y público consumidor. 

Además, recordemos que Liberty Media busca convertir a Estados Unidos en la cuna del automovilismo, no por nada inviertieron cerca de 400 millones de dólares en el Gran Premio de las Vegas. 

Sulayem representa todo lo contrario: el poderío árabe que también busca hacerse con el mundo de los deportes. De otro modo no habrían invertido millones de dólares en jugadores del calibre de Cristiano Ronaldo, Karim Benzema, Neymar Jr. etc. 

En cuanto a la F1, la región arábiga ya tiene cuatro grandes premios, dos de ellos abren y cierran la temporada, además de enormes patrocinadores como Aramco y Qatar Airways. 

Recordemos que a inicios del año pasado Arabia Saudita ofreció 20,000 millones de dólares por los derechos del campeonato. Algo que Liberty Media desde luego rechazó. 

No sería un asombro que esto se da cuando un presidente de la région arabe parece tener muchos problemas para desempeñar sus funciones. 

¿Será que este fue un golpe orquestado por la FOM para hacer quedar mal a la FIA y Ben Sulayem? 

No quiero caer en acusar sin pruebas, o decir que Sulayem debe renunciar al cargo por conflicto de intereses entre él y los gobiernos de la región, pero es bastante curioso todo el entramado político-económico que hay más allá entre FIA y FOM. 

A partir de ahora, las tensiones y conflictos entre estos dos grupos deben ser examinados más allá de lo que pasa en la pista, si o no a nivel empresarial, pues al final son los que mueven los hilos detrás de bambalinas. 

Desde los Garajes toca esperar hasta Bahreïn 🇧🇭. 

Veamos qué ocurre en los próximos meses de Silly Season. 

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