Por: Fernando Salinas // foto: jalopnik
Lewis Hamilton se parece al típico chico egoísta y competitivo que mientras está en la cima las circunstancias y reglas le parecen válidas, pero apenas la balanza se torna a favor de sus oponentes, comienza a denunciar los mismos estatutos que una vez defendió.
El campeón de siete temporadas de la Fórmula 1, estrella de Mercedes, lleva denunciando desde hace algunas semanas lo que parece ser el nuevo imperio forjado por el Equipo de Red Bull a lado de sus pilotos, Max Verstappen y Sergio Pérez.
Exige que la FIA establezca parámetros como la "congelación" del desarrollo del motor del Toro Rojo unos meses a favor del espectáculo. Y es que el RB19 es un monoplaza que no falla: con neumáticos suaves, intermedios y duros; pistas secas o húmedas. Las condiciones no importan. El auto vuela y destroza a la competencia, como la humillación que le dio a Leclerc en el GP de Austria al rebasar por 18 segundos. Esta configuración también le ha permitido a Checo remontar sus lamentables resultados en Qualy, dando de esta forma unos saltos en la parrilla impresionantes.
Sin embargo, es bastante hipocresía de Hamilton plantear estas supuestas soluciones si tomamos en cuenta que desde la temporada de 2014 hasta la de 2020, Mercedes fue la escudería ganadora de 7 títulos del campeonato de Pilotos y hasta el 2021, de 8 títulos del campeonato de constructores. En los tiempos de oro de Mercedes las reglas de la FIA respecto al dominio de una escudería sobre otras eran mucho más laxas, y en aquellos tiempos (salvo Red Bull) eran muy pocos los reclamos procedentes del resto. El caso de Red Bull fue muy específico, ya que ellos también solicitaban regulaciones por parte de la FIA, puesto que tecnológicamente Mercedes se encontraba a años luz de sus competidores.
Recordemos que su racha de victorias se extendió por siete años. A Hamilton se le ha olvidado eso, ¿O es que acaso los espectadores no se cansaron de verlo por tanto tiempo en el podio?
No hay que confundir. Hamilton es un piloto increíble. De lo mejor de este siglo, me atrevo a decir sin miedo un Top 2, pero es demasiado conveniente esa posición de pedir equidad cuando él nunca se pronunció de la misma manera cuando su escudería estuvo en la cima.
Dudo mucho que la FIA haga caso a estas observaciones por parte del británico, pues no estamos en 2014. Como se vió la semana pasada en Silverstone las mejoras cada vez se acercan, y es únicamente y exclusivamente responsabilidad de los equipos dar el 110% para explotar al máximo la capacidad de sus monoplazas. En la máxima categoría del automovilismo los errores se pagan caro.
¿Y qué se puede decir de Red Bull? ¿Seguirán en la cima de cara al resto de temporada y 2024?
Tiempo al tiempo. Con la noticia de que Red Bull ha testado sus nuevas actualizaciones con completo éxito y se vienen para estas próximas carreras, la expectativa de continuar con este flujo de victorias se hace grande. Sin embargo, recordemos que un mínimo error al momento de testear en prácticas (que es muy diferente a las pruebas en el túnel de aire) puede costar milésimas de segundo y por ende, la competencia.
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